Cómo usar Acuerdos de Suscripción, Pagarés y Prendas en una empresa

Eddy Ramírez
May 2, 2025

Cuando entramos al apasionante mundo empresarial y financiero de Canadá, comprendemos que la seguridad de nuestra inversión es imprescindible, y es entonces que empezamos a ver la importancia de contar con documentos contractuales y guías legales que protejan nuestros derechos como inversionistas y definan los deberes y obligaciones dentro de la empresa. 

Tres instrumentos clave para lograrlo son los Acuerdos de Suscripción, los Pagarés y las Prendas, cada uno con funciones específicas que garantizan estabilidad y protección.

En este blog, hablaré de cómo estos instrumentos pueden fortalecer su inversión y asegurar el éxito de su empresa. Lea hasta el final y descubra cómo utilizarlos a su favor. ¡Comencemos!

¿Qué es un Acuerdo de Suscripción?

Un Acuerdo de Suscripción es un contrato mediante el cual un inversionista se compromete a aportar capital a una empresa a cambio de la emisión de acciones o participaciones. Este documento establece de manera clara y precisa los términos y condiciones en los que se realizará la inversión. 

Entre los aspectos que suelen incluirse se encuentran:

  • El monto de la inversión, es decir, la cantidad específica de dinero que el inversionista aportará.
  • El precio de las acciones o participaciones para determinar el valor al que se suscribirán.
  • Los derechos y las obligaciones del inversionista, como la participación en los beneficios o en la toma de decisiones, y las obligaciones de la empresa emisora.
  • Las condiciones de cierre, en donde se describen los requisitos que deben cumplirse para que la transacción se complete, como la verificación de la situación financiera de la empresa o la aprobación de ciertos órganos corporativos.

La redacción y revisión minuciosa de un Acuerdo de Suscripción garantiza que ambas partes tengan claridad sobre sus compromisos, lo cual es esencial para una relación de inversión transparente y segura.

¿Qué es un Pagaré?

El Pagaré es un documento escrito en el que una persona (o entidad) se compromete incondicionalmente a pagar una cantidad determinada de dinero en una fecha específica o a la demanda. Este instrumento se utiliza frecuentemente en el financiamiento a corto plazo y en situaciones donde se requiere una promesa de pago clara y legalmente ejecutable. 

Entre sus características se destacan:

  • La obligatoriedad de pago, ya que el deudor se compromete a abonar la suma estipulada, esto convierte el pagaré en una herramienta de crédito.
  • Conlleva un plazo de pago, porque establece una fecha límite o un evento que desencadene el pago.
  • Maneja tasas de interés o penalizaciones. En algunos casos, el pagaré puede incluir términos sobre intereses o cargos adicionales si hay un retraso.
  • Es de fácil ejecución, ya que, al estar formalmente redactado y firmado, el pagaré se presenta como un documento legal que facilita la acción judicial en caso de incumplimiento.

La precisión en la redacción y una revisión detallada de los pagarés son fundamentales para reducir riesgos y asegurar que la promesa de pago sea válida y exigible.

¿Qué son las Prendas?

El concepto de Prenda se refiere al acuerdo mediante el cual un deudor entrega un bien como garantía del cumplimiento de una obligación, generalmente un préstamo. Este bien puede ser mueble, inmueble o incluso ciertos valores, dependiendo de lo pactado entre las partes. 

Tres características clave de un Acuerdo de Prenda en el mundo empresarial son:

  • Ofrece garantía sobre bienes muebles (como maquinaria, inventario o vehículos) como responsiva de pago. Esto significa que el acreedor tiene derecho sobre ese bien en caso de incumplimiento.
  • Maneja un contrato accesorio. La prenda no existe por sí sola, sino que está vinculada a una obligación principal, como un préstamo o una deuda. Su propósito es asegurar el cumplimiento de esa obligación.
  • Da derecho preferente del acreedor. Si el deudor no cumple con el pago, el acreedor tiene el derecho de ejecutar la prenda, lo que le permite vender el bien dado en garantía para recuperar la deuda pendiente.

Procedimiento en caso de incumplimiento

En este escenario, se establecen los pasos a seguir si el deudor no cumple con sus obligaciones, permitiendo al acreedor ejecutar la garantía y recuperar el monto adeudado.

La exactitud en la redacción de los Acuerdos de Prenda es esencial para que la garantía sea sólida y pueda ser aplicada en caso de que surja un conflicto sobre el cumplimiento del compromiso.

Recomendaciones para inversores latinos en Canadá

La correcta utilización de los Acuerdos de Suscripción, Pagarés y Prendas permite a inversores y prestamistas gestionar sus riesgos de manera efectiva y construir relaciones comerciales seguras. En un entorno como el canadiense, donde la estabilidad económica y las oportunidades de inversión son amplias, contar con estos documentos es un pilar que sostiene el éxito empresarial. 

En Immiland Law, recomendamos que:  

  • Busque asesoría legal especializada antes de firmar cualquier acuerdo. Consulte con abogados expertos en derecho corporativo canadiense. 
  • Revise cada documento con detalle  y se asegure de que los términos sean claros y protejan sus intereses. 
  • Considere la estructura legal de su empresa dependiendo de su tipo de negocio, ya que ciertos acuerdos pueden ser más beneficiosos que otros. 
  • No subestime la importancia de las garantías; un acuerdo bien estructurado puede ser clave para asegurar financiamiento. 
  • Mantenga registros actualizados. Recuerde que la documentación bien organizada facilita la gestión empresarial y previene conflictos futuros. Puede ampliar esta información en: Mantenimiento de registros corporativos en Canadá.

En Immiland Law, ofrecemos asesoría legal especializada para inversores latinos en Canadá. Si desea proteger su inversión y estructurar acuerdos sólidos de Suscripción, Pagarés y Prendas, contáctenos para recibir orientación personalizada.

Espero que este tema sea de utilidad para el éxito de su empresa. 

Muchas gracias por leernos. ¡Nos vemos en el próximo blog!

Con amor,

Immiland Law